En un mundo donde lo inmediato parece ganar terreno, Casa Farina elige otro camino, el del tiempo, el del cuidado y el de lo verdaderamente artesanal para compartir. Desde 2018, esta pastelería, panadería y cafetería creada por tres hermanos marplatenses se convirtió en un punto de encuentro para mendocinos y turistas que buscan más una experiencia más que solo un café.
Su propuesta nace de la convicción de que hecho a mano tiene otro valor. Cada producto tiene detrás una producción artesanal trabajada, una selección rigurosa de materias primas y un equipo comprometido con mantener la calidad como norma, no como excepción.
Desde las medialunas con receta de Mar del Plata que llegaron a Mendoza para enamorar con su esponjosidad y ese almíbar que convierte cada bocado en un suspiro; las tortas como el cheesecake tradicional o de pistacho, hasta las cinco variedades de alfajores -oreo, miel, alfacoco, integral y sablé-, los macarons artesanales y el café del día, todo pensado para disfrutar en cualquier momento.
En sus dos locales, uno en Zona Dalvian y otro en una casona de los años 60 sobre la Avenida Arístides Villanueva, Casa Farina propone un espacio ideal para hacer una pausa y también, uno donde conseguir los dulces para tu mesa navideña. Acá, las texturas, los aromas y la atención cercana construyen un momento que se siente auténtico.
Para cerrar el año compartiendo dulzura
De cara a las fiestas, Casa Farina abrió su agenda de pedidos con una propuesta pensada para regalar o acompañar la mesa dulce de fin de año con productos artesanales, donde la tradición, el sabor y una presentación cuidada se combinan en cada detalle.
Entre los destacados se encuentran los panes dulces especiales, en versiones de chocolate con chips y frutos secos, junto a las clásicas roscas de Navidad rellenas de dulce de alcayota o membrillo. La propuesta se completa con brownies decorados, como el de dulce de leche y crema chantilly, ideales para partir y compartir.
Además, ofrece una cuidada selección de tortas y tartas artesanales, entre las que se destacan la pavlova reversionada, una de las estrellas del verano; el crocante de pera, con capas de crocante de almendras, compota de peras y una corona de dulce de leche en cada piso; y la torta de mascarpone y frutos rojos, fresca y equilibrada. Estas opciones se suman a los boxes navideños y a una línea de productos exclusivos de temporada, pensados especialmente para estas fechas.
La pastelería y panadería cuenta también con una línea mayorista destinada a cafeterías, hoteles, restaurantes y empresas que buscan incorporar productos artesanales con identidad propia. Con capacidad de producción sostenida, logística eficiente y la misma calidad que caracteriza su propuesta minorista, la marca se consolida como un aliado para quienes desean elevar su oferta sin perder autenticidad.
Casa Farina no busca ser la pastelería del momento ni la más rápida, sino ser la más humana. Y quizás ahí radica su verdadero diferencial.
Para hacer encargos de productos, consultas o reservas, pueden contactar al 261 7218711 o acercarse a alguna de sus dos sucursales: Arístides Villanueva 498, Ciudad, o Dr. Posse 3331, Zona Dalvian. Para tentarte con su catálogo de delicias, podés visitar su web casafarinapasteleria.com.ar o Instagram @casafarinamendoza.
