Marcos Zabaleta, chef de la Bodega Séptima está lanzando en estos días un producto totalmente novedoso para Mendoza y Argentina, se trata de los cristales de vino o sales impregnadas en Malbec, Cabernet, espumantes, verduras y cítricos. Una delicatesen única.
La idea, tomada de su experiencia en restaurantes de Francia, consiste en hidratar cristales de rocas de sal en vino o en otros productos como remolachas, puerros y cítricos.
Los cristales obtenidos se usan para sazonar comidas agregando sabor, aroma y color. Marcos empezó usando las sales en sus platos del restaurante María de Séptima y el éxito obtenido lo impulsó a envasar las sales y comercializarlas bajo la marca Cristales de Vino.
¿Cómo se hacen? De una manera absolutamente artesanal y casera. Marcos compra cristales de roca de sal y los rehidrata con los jugos del producto elegido. Se mezcla una parte de sal por una parte de vino (en el caso de las sales de vinos), entibiados a unos 70° y removiendo unas cinco veces al día. Para hacer las sales de remolacha hay que rallar las verduras en frío y mezclarlas con la sal removiendo unas 10 veces por día. El proceso completo demora aproximadamente una semana.
Ya tienen partidas envasadas de cristales impregnados en Malbec, Cabernet, espumantes, remolachas, puerros, cítricos como pomelos y naranjas, y están experimentando con maracuyá y mango.
En el restaurante se sirven en pequeños saleros. Marcos utiliza por ejemplo, sales impregnadas en cítricos para condimentar pescados y langostinos. Las sales de remolacha las utiliza para realzar vinagretas. La posibilidad de combinar el producto en los diferentes platos dependerá del gusto y la imaginación de quien cocina.
En María, los comensales quedan gratamente sorprendidos por el nuevo mundo de color, aroma y sabor que generan estos diminutos cristales en sus platos.
A Marcos ya le han pedido sus sales para negocios deli de Buenos Aires y está definiendo la etiqueta de sus primeras partidas. Por ahora en Mendoza, los novedosos cristales de Marcos Zabaleta se pueden comprar o disfrutar en el restaurante María de Bodega Séptima.
